Con una alimentación basada en la Dieta Mediterránea Tradicional, podemos ayudarte a prevenir, mejorar y curar a la mayorÃa de las enfermedades infantiles
Es de sabidurÃa popular y reconocido por cada vez más sociedades cientÃficas, que una alimentación adecuada es la mejor manera de promocionar la salud.
¡Somos lo que comemos!
La mayorÃa de las enfermedades del ser humano se pueden prevenir cuidando nuestra manera de comer. Hasta aquà todos están de acuerdo.
Sin embargo, una vez que se han desarrollado las enfermedades, no todos parecen estar de acuerdo en que estas pueden revertir, mejorar o curarse, recomponiendo la dieta y eliminando los factores que la alteraron.
Si una mala alimentación ha contribuido a que aparezcan enfermedades y dolencias diversas, por qué la medicina convencional no pone atención en recomponer y resolver los errores alimenticios detectados.
Una historia de medicina preventiva de la antigua China
Voy a contarles una historia que sucedió en la antigua China y que nos ponÃan como ejemplo los profesores de Medicina Preventiva, cuando estudiábamos en la facultad de medicina.
Los médicos chinos de la antigüedad eran valorados por sus conocimientos preventivos y la comunidad los mantenÃa a condición de que pudieran prevenir, mejorar y curar las distintas enfermedades que solÃan afectar a la comunidad.
Cuando un paciente se ponÃa enfermo, se presumÃa que algo habÃa fallado en su organismo que le impedÃa defenderse bien de esa dolencia. Sus defensas naturales habÃan fracasado. Sus mecanismos defensivos no habÃan resuelto el problema de forma espontánea, como habitualmente solÃan hacerlo.
Los sabios y ancianos de la aldea consideraban que algo no estaba funcionando bien en el organismo del enfermo. Y se le pedÃa al médico que averiguara las causas y los desencadenantes de dicha enfermedad.
El médico era de alguna manera examinado. TenÃa que esforzarse para encontrar la causa por la que el enfermo no habÃa podido defenderse adecuadamente. TenÃa que valorar todos los desencadenantes y poner todo su interés en resolver el origen de esa enfermedad.
Si no encontraba la causa, los sabios y ancianos de la aldea pensarÃan que no sabÃa enfrentarse a los retos de esa enfermedad. El consejo de ancianos considerarÃa que no habÃa sido capaz de adelantarse a sus efectos patológicos.
Si la salud de la comunidad no era buena, y las enfermedades se repetÃan excesivamente, se considerarÃa que no sabÃa lo suficiente y que no proponÃa las medidas adecuadas que conducÃan al estado de salud.
Si esto llegara a ocurrir, era posible que la comunidad le dejara de mantener y probablemente llamarÃan a otro médico con más conocimientos preventivos.
¡Los médicos chinos de la antigüedad eran valorados sobre todo por sus conocimientos preventivos!
Parece ingenua esta antigua historia, y que no es de nuestro tiempo y sin embargo tiene cierta similitud con lo que nos está sucediendo a nosotros desde que hemos iniciado la PediatrÃa Nutricional.
Los niños que comen adecuadamente, apenas se ponen malitos, con escasa repercusión en su estado general y con pronta recuperación de su salud, casi no los vemos en la consulta de pediatrÃa.
Esto no quiere decir que no tengamos niños enfermos con patologÃa frecuente, ya que no todos los pacientes que vienen a la consulta siguen la Dieta Mediterránea Tradicional, pero si es muy significativo, que en una especialidad como pediatrÃa, que se nutre principalmente de enfermedades agudas, tengamos en la consulta unas cifras de niños programados para la supervisión de su salud superior al número de niños que acuden por enfermedad.
Esto no nos habÃa ocurrido antes, ni ocurre en los consultorios habituales de pediatrÃa, donde el 90 % de los niños, acuden por causa de enfermedades agudas.
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Nuestro equipo lleva años trabajando en la prevención y tratamiento de las enfermedades infantiles, y según los estudios de investigación que estamos realizando, la mayorÃa de las enfermedades infantiles se pueden prevenir, mejorar y curar y han sido originadas por el abandono de la Dieta Tradicional.
Nuestro trabajo como terapeutas-médicos, consiste en detectar cuales han sido los errores y las modificaciones culinarias que se han introducido en tu menú habitual, y a continuación darte las pautas para su corrección, siempre siguiendo el modelo de la Dieta Mediterránea Tradicional.
Quizás pienses que en tu casa se come bien, de acuerdo a las normas establecidas, pero hemos observado que en general se come bastante mal, incluso en aquellas familias que se preocupan por una buena alimentación.
No es culpa vuestra. Ni de los pediatras. Ha sido inducido principalmente por la presión sistemática de la industria alimenticia y su búsqueda de beneficios en el mercado de alimentos.
Hemos hecho estudios de investigación, de la mayorÃa de las enfermedades infantiles que vemos en Atención Primaria. Los hemos presentado en los Congresos Nacionales de PediatrÃa. Y ahora los estamos publicando en revistas de pediatrÃa. (Ver en menú: Estudios).
No son ensayos clÃnicos, para los que se necesitan muchos recursos económicos y logÃsticos – que nos gustarÃa tener-  pero sà que entran en la categorÃa de estudios analÃticos antes-después, con un aceptable nivel de evidencia. Seguiremos investigando para aumentar el nivel de evidencia.
En algunas enfermedades poco frecuentes, no se han podido completar los estudios por falta del suficiente número de pacientes, aunque la mejorÃa que hemos observado es también muy evidente.
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Nuestro modelo de curación no es inmediato, sino que está basado en estimular a las «Fuerzas auto-curativas de la naturaleza», lo cual precisa de un periodo de tiempo necesario para restaurar el equilibrio natural perdido y normalizar progresivamente la composición de los alimentos y sus nutrientes.
Enfermedades recurrentes de la infancia, que se pueden prevenir, mejorar o curar con PediatrÃa Nutricional
A continuación vamos a exponer la lista de enfermedades habituales de la infancia en las que podemos ayudarte a prevenir, mejorar y curar, y que mejoran en el plazo de semanas o de algunos meses, tras la instauración de una dieta adecuada.
En ella están incluidas más del 90 % de las enfermedades habituales de la consulta de pediatrÃa de atención primaria.
Sistema inmunológico y área ORL
- Catarros de repetición
- Complicaciones bacterianas frecuentes
- Rino-sinusitis de repetición
- Otitis de repetición
- Obstrucción nasal persistente, con patologÃa obstructiva e infecciosa
- Hipertrofia adenoidea y amigdalar
- Apneas del sueño
- Derrame persistente del oÃdo medio, con dificultades para la audición
Sistema metabólico
- Sobrepeso y obesidad
- Inapetencia infantil
- Escaso crecimiento pondero-estatural o Fallo del medro
- Astenia o cansancio persistente
- Diabetes tipo II
Sistema digestivo
- Dolor abdominal recurrente
- Estreñimiento
- Diarrea persistente
- Cólico del lactante
- Regurgitaciones del lactante
- Molestias digestivas persistentes
- Caries dental
Sistema inmuno-alérgico
- Asma infantil o Sibilantes recurrentes
- Rino conjuntivitis alérgica
- Eczema atópico
- Acné infanto-juvenil
- Queratosis pilaris
- Aftas bucales recidivantes
Sistema neuro-sensorial
- Dolores de cabeza frecuentes
- Problemas para conciliar el sueño
- Dolores musculares en las extremidades
- Tendinitis y dolores articulares frecuentes
- Lesiones deportivas frecuentes
- Déficit de atención con hÃper-actividad